Conocerme antes de conocerl@

Mejores noches yo no creo que existan y aunque me pida otra cerveza, solo me interesa beber de ti... "Morat"

Esa soy yo, coqueteando con mi soltería... Mi eterna soltería 

Tengo 22 años y a esta edad aún no sé de qué se compone la palabra COMPROMISO o RELACIÓN.

Podría pensar que en años pasados di demasiado a las personas incorrectas y desperdicie todas las buenas intenciones en romances fallidos o efectivamente no di absolutamente nada a las personas correctas y desperdicié un buen amor por miedo a que me volvieran a lastimar...

pero...

no es algo que esté lamentando totalmente.

En algún tiempo me enamoré hasta los huesos y me encantó esa sensación de ser amado, de que te presten atención, te quieran ver, quieran estar día a día contigo o confíen en ti; me encantó la sensación completamente, pero una vez me di cuenta de lo feliz que era sola, soltera, no quise comprometerme con otra persona más que conmigo.

Sí, algunos pueden pensar que es algo petulante, egoísta o vanidoso, pero a esta edad no necesito de nada, más que de mí y de mi familia.

 La soltería es ese estado de plenitud, donde te conoces verdaderamente, sabes que te gusta, que no, sabes que permitir en una próxima relación y qué no permitir más.

Es ese estado donde haces lo que te dé la gana, sin reclamos o excusas. Es ese estado donde estás a la defensiva por miedo a cometer un error más que acabe destruyendo tu corazón de una vez por todas.

Para ser muy sincera, ya perdí la cuenta de la cantidad de citas que tuve para tratar de "encontrar" a esa persona correcta, olvidando que para poder encontrarla tengo que conocerme, valorarme, corregirme y encontrarme yo primero. 

En la actividad llamada vulgarmente” prueba y error” nos podemos hacer tanto daño que al final de cuentas no vemos a quién le rompemos el corazón y quién nos lo destroza completamente.

Es totalmente cierto que en muchas ocasiones he tratado de salir de ese estado de plenitud, pero en definitiva estoy en una relación super seria con mi soltería. Prefiero mantenerla ahí, quieta, intacta. Renovarla día a día.

El ser soltera se ha convertido en mi mayor tranquilidad. Puede que para muchas personas estar en una relación sea lo más genial que les haya pasado ya que cuentan con su alma gemela en su estado de plenitud y se amen realmente en sus relaciones respetuosas y llenas de amor, como puede que otras personas estén anhelando una soltería pronta por sus relaciones tóxicas y humillantes.

El querer estar soltera no significa que exista el "MIEDO" a una pronta relación; Significa que se espera una mejor preparación del libreto llamado vida donde los únicos líderes de su guion son ellos mismos. Ellos deciden, ellos escogen, ellos viven, ellos actúan y ellos son realmente felices. con "ELLOS" me refiero a ti, a mí, al no dejar que nadie gobierne nuestras vidas. 

Porque una vez te das cuenta de que tienes las agallas suficientes para elegir tu camino y tomar tus propias decisiones no quieres volver a saber de relaciones donde te prohíben, cohíben, te detienen de tus caminos, de tus metas, no te dejan avanzar y te hacen dudar de lo que eres y lo que sientes.

Sé que en algún punto de mi vida tendré una relación estable, en la cual me enamore y quizá quiera compartir mi vida con ese personaje, pero mientras eso sucede, quiero seguir gozando de mi soltería, sin complejos ni ataduras, amándome como jamás nadie me ha amado, aceptándome como jamás nadie me ha podido aceptar y respetándome como jamás nadie me ha respetado.

Estoy totalmente segura de que hay infinitas posibilidades de creer en el amor, de creer en mis propósitos y capacidades, y que sin importar los límites sociales que intenten atravesar mi camino, estoy totalmente segura de que yo lograré cada punto, cada propósito que me plantee tanto laboral como personalmente, sin afanes, sin apuros, confiando al cien por ciento en mí.

No quiere decir que esté dejando a un lado mi vida amorosa, simplemente está en un descanso, está de vacaciones. 

Vacaciones que quizá la sociedad poco entienda, como poco entienden de decisiones y más cuando son tomadas por nosotras las mujeres, pero no importa.

Ya está, 

Al fin y al cabo, soy yo quien debe importarme, antes que nada. Así que sí, finalmente, conocerme antes de conocerlo.